Translate

lunes, 16 de diciembre de 2013

Vida y muerte

A la vida le precede la muerte en un ciclo eterno de regeneración en el que el universo evoluciona en continuo movimiento. De mantenerse todo estático en un equilibrio perfecto, solo existiría la desidia y el desánimo sería inaguantable. Negar la muerte y su regeneración nos aleja de la vida. Nos aleja de las cosas importantes, nos hace vivir como si no fuese a terminar este concierto, soslayando para un tiempo futuro la búsqueda de la felicidad y haciéndonos  perseguir espúrios intereses.

Parece cruel pensar que todo lo que somos terminará en una descomposición paulatina e imparable, pero una vida eterna siempre igual, solo pensarlo me llena de más angustia de la que me genera la muerte y siento un profundo hastío.

¿Para que una vida eterna, si no fuese capaz de encontrar satisfacción en la que ahora vivo?Desperdiciar más tiempo, todo el tiempo de la eternidad.

La presencia de la muerte me hace pensar en lo necesario que es vivir sin malgastar el tiempo, en estar feliz, cuanto se pueda, ahora. Perseguir las sombras del destino es perderse en un mundo de sensaciones ajeno a nuestros deseos. Desear desesperadamente lo que uno no es o ambicionar lo que nos dicen que nos dará la felicidad sin reparar antes en lo que somos y nos hace falta...no sé donde conduce. O manejo mis teorías, engañado como todos vosotros.

viernes, 22 de noviembre de 2013

Emerjo

Los reflejos del sol roto en mil pedazos hacen una danza inverosímil mientras contengo la respiración y asciendo para tomar aire. Arriba veo la luz partida por la superficie y al alcanzar el aire me embarga la sensación absurda de la sorpresa al comprobar que el mundo sigue ahí tal y como lo conocía cuando me zambullí. En algún momento pensé en que al llegar arriba alcanzaría un mundo que no era el mío. No sé si mejor, eso no me lo planteaba. No, no era un pensamiento de huida, solo un sentimiento de fragilidad de la realidad o de irrealidad de la vida.

Emerjo a la superficie con ansia de llenar mis pulmones.

miércoles, 9 de octubre de 2013

Estamos muertos.

Estamos muertos. Caminamos y no encontramos calidez en nuestros actos. La responsabilidad nos agobia, la mente no encuentra descanso. No hay amor ni sentimientos que calienten el cuerpo, no hay una chispa de imaginación ni un prometedor pensamiento que ocupe nuestra mente. No hay decisiones limpias, todo queda impuro y condicionado por una forma de ver y entender el mundo que nos hace movernos sin parar como si de esa forma, y solo de esa, pudiésemos mantener el equilibrio. No tenemos agallas para coger el control, para dejar de sentir lo que no queremos, lo que nos han metido tan dentro, tan profundamente dentro, que ya no sabemos diferenciarlo de nosotros mismos. Nos da miedo concebir que podamos andar por otro camino de tan marcada que tenemos la senda por los que nos precedieron.

Y mientras andamos y andamos y seguimos andando sin parar, nuestro destino nos alcanza cuando las suelas de nuestros zapatos ya están completamente desgastadas. Y no podemos hacer ya nada, viendo como no tuvimos un momento para parar y mirar y ver quienes somos.

domingo, 6 de octubre de 2013

La hojita

No soy más que una hojita que arrastra la corriente, se arremolina en las turbulencias y retorna a bajar, sube y baja al son de la abrupta corriente,  suave ahora y abrupta de nuevo...


¿Qué es la vida? No tenemos tiempo para vivir. La máquina nos engulle más que nos libera.
Taishen Desimaru
La práctica del Zen 

Decía Mester Eckart, parafrasándolo, que "Los demonios que quieren llevarnos no son más que ángeles a los que nos resistimos al no aceptar la muerte". No conseguí entender a Mester Eckard si no a través de los libros de Erich Fromm y sus interpretaciones. En casa tengo muy manoseado "El triunfo de la nada" que compré, creo, en una terminal de aeropuerto.

En la película de terror de titulada en España "La escalera de Jacob"  aparece un personaje que es el quiropráctico del protagonista. A lo largo de la película le suelta varias citas de Mester Eckart para guiarle en su búsqueda del entendimiento. Aparecen demonios que quieren arrastrarlo al infierno, hasta que entiende que realmente está muerto, y los demonios aparecen ahora como ángeles que le llevan...


Bueno, creo que con esta entrada me he repetido un poco.

El libro de La practica del Zen es un buen manual de zen y escrito para mentes occidentales. Explica sucintamente la práctica del Zen y el significado de algunos koan, pienso que es una buena guía de iniciación. Después habrá que encontrar un maestro, yo todavía no lo he encontrado.

La cabecera de esta entrada es lo que me ha venido a la cabeza mientras escuchaba un solo de piano de George Winston. Me gustaría ser esa hoja que simplemente se deja arrastrar en vez de estar luchando y no ver demonios donde en realidad hay ángeles. Conocer realmente lo que soy para poder parar el tiempo y que la máquina no me engulla. Entre tanto, de vez en cuando, retomo la meditación que suelo olvidar cuando la máquina me atrapa e intentar, sin mayor intención, dilucidar qué es la vida.

Ken Robinson habla del elemento, aquello para lo que somos más aptos. Aquí, la maquinaria se encarga de matarlo y evitar que comprendamos quienes somos y busquemos nuestro elemento. La máquina, la escuela, no es un buen lugar para conocerse a fondo. Si estás capacitado para, por ejemplo, ser escritor, la escuela no va a sacar esa faceta tuya. Es un rodillo nivelador que coloca a todos a la misma altura. Los superdotados solo interesan por sus aptitudes matemáticas.

La creatividad y otras habilidades están fuera de la escuela, heredera de la que se creo en los albores de la revolución industrial. Una escuela que capacita a los obreros con unos saberes prácticos para la cadena de montaje. El trabajo, tal como está ahora, es un entorno altamente deshumanizado. Se compra y se vende el tiempo, ese que nos falta para vivir. Hay intermediarios que sacan tajada de ese intercambio.

Muchos de nosotros estamos en esa situación en la que se mercadea con nuestro trabajo y donde empresas sacan pingües beneficio colocándonos en clientes. Es el sector de la informática el que más conozco y los casos de cesión ilegal, en el que grandes empresas conocidas son cómplices, es de lo más habitual esta práctica.

Estamos en los inicios del siglo XXI y la maquinaria que nombra Taishen Desimaru está muy bien afinada. Tenemos somníferos para descansar, consumimos para aliviar la angustia de sentirnos nada, mientras la maquinaria nos trata como cosas, manipulándonos, eliminando cuanta humanidad hay en nosotros y en la misma medida anulando la capacidad de saber quienes somos.

No me parece anecdótico el caso de Díaz Ferrán. Los que manejan la maquinaria mienten y manipulan. Este señor propuso muchas cosas que iban en detrimento de los trabajadores, de un sueldo justo y de tener tiempo libre, tiempo es vida. Mientras, desfalcaba, vaciaba el capital de las empresas, estafaba a clientes... el signo del capitalismo.

Si alguien te pide compromiso con la empresa mal vamos. Mi jefe es muy manipulador y se piensa que soy imbécil, sé que no me subirán el sueldo o la categoría nunca ni que me darán nada que sea un ascenso. Dejaré que siga pensando que soy un imbécil, ya sé que mi futuro no está en la informática, que no haré carrera en mi empresa y que tampoco quiero ascender en la escala de la deshumanización. Lo digo por que mi empresa es como un campo de concentración ponle tu el nombre que quieras, en donde asciendes si eres más malvado y sádico con los prisioneros y el más malvado, sádico y psicópata es el director del campo. Intentaré mantener la dignidad y tener confianza en el futuro, no tener miedo. El miedo cercena la creatividad y convierte a los ángeles en demonios.

La maquinaria te vende somníferos y cosas para que seas feliz, te ha enseñado que ahí está la felicidad: tanto tienes, tanto vales. Funciona tan bien que no te planteas nada, tu futuro y realidad se basa en ganar más y tener mejor casa y coche. No te planteas además, por que, desde la escuela, estás muy condicionado a estudiar una carrera, a no arriesgarte, a no coger las riendas de tu vida y seguir el camino trillado.

Hoy pocas carreras ofrecen salidas laborales. No hay trabajo, por lo que está muy devaluado: mucha oferta de capacidad laboral y poca demanda. Esto tira a la baja el precio del trabajo que son nuestros salarios y nuestro tiempo. Nuestro tiempo es vendido como las frutas, hortalizas y demás productos del campo. Un informático, hoy en día, es como un agricultor: los intermediarios se quedan con la mayor parte del beneficio y quedan migajitas para llegar a fin de mes.

Le vendemos el alma al diablo, y el cuerpo, la cascara que queda, se queda en la línea de producción.

Mejor arriesgarse, buscar aficiones, intentar parar el tiempo, dejar aparcada la necesidad de sentirse algo a base de compras y arriesgarse no acallar las voces con somníferos. Si no duermes bien, ¿qué está pasando?

Nos toca vivir una época difícil, es momento de que nos pongamos codo con codo a colaborar e intentar no engrasar más a la maquinaria. Dejar de pertenecer a este matrix que se alimenta de nuestra energía vital, no dejar que nos quiten lo más preciado, que el cuerpo no quede como un cascarón vacío. Hay que hablar y reunirse, sentirse en comunidad y sentir al otro.

Escupida esta entrada, ya en otro momento intentare pulirla un poco. Si han habido faltas, ya lo revisaré.

Gracias Raquel por haber compartido este vídeo, ideal para el momento:


¿Bailamos? por dm_523e02e4c6a97

domingo, 29 de septiembre de 2013

Tómate tiempo

El necesario y justo para cada momento. Tómate tu tiempo para sentir lo que te rodea y percibir tu cuerpo, tu posición en el mundo.

Relate y mira dos vídeos que te recomiendo. Este primero:


Pequeño from tropofilms on Vimeo.

Y este después.

lunes, 15 de julio de 2013

Mariola

Coger un cachito de vida, empaquetarlo en una caja con cinta, y llevárselo para casa para soltarlo cuando más convenga, si hace falta rememorar esa emoción que por unos instantes nos ha transportado a un mundo mágico.

La infancia, al menos en mí, nos acompaña toda la vida. Acostado mirando al cielo, la luz del sol cegándome los ojos a ratos por el abanico de las hojas y el murmullo del viento meciéndolas. Muchas veces ya, muchos años ha, niño acostado mirando al cielo que dejaban ver las hojas y escuchando el crepitar del aire que las mece. Descubrir el mundo por primera vez, que suerte en mí poder volver a ese punto de la infancia y volver a mirar como si fuese la primera vez, ya, a mi edad tardía. Y pensar que por muchos años que pasen, en algún momento y en algún lugar me encontraré acostado mirando al cielo y descubriendo el mundo por primera vez, por muchos años que tenga emocionarme como chico pequeño.

Esos momentos felices de una infancia ignorante del mundo de los adultos, de lo atroz que le rodea, que se mantienen con un recuerdo vívido, hermoso y sin mácula. Los miedos son inconscientes por que su recuerdo es duro y el olvido necesario. Cuando olvidamos no lo hacemos del todo, hundimos lo inicuo en lo más profundo del lago pensando que no nos alcanzará. Pero aquello que escondemos es parte de nosotros y vive dentro de nuestro ser. Y surge como un reflejo en el lago, borroso en agua turbia y deformado por los rizos de la superficie del agua.

Suscitado por la Sierra de Mariola, por el viento, el sol y los árboles del camping. Por la caminata que nada prometía y nos llevó a una senda hermosa, como metáfora de la vida, un andar que no sabemos a donde conduce.

jueves, 11 de julio de 2013

Pastoral

Autobús de camino al trabajo y Pastoral Americana de Philip Roth:  evoco a los negros americanos en los campo de algodón. No, la novela no va de la vida en los campos de algodón, simplemente evoco a los negros americanos en los campos de algodón y a la lucha por la libertad de los esclavos. Evoco la España agraria y agría de los señoritos y los latifundistas, a los obreros de las fábricas de otra época y comparo con la nuestra actual de paro endógeno.

Una persona desempleada cae en la desesperación sola sin nadie que comparta su estado, un grupo amplio y acogedor que soporte su mismo destino. Los obreros en las fabricas sufrían juntos penosas condiciones y eso les permitía concebir un destino, una conciencia de clase, un objetivo definido en la lucha por mejorar sus condiciones. El desempleado se deprime, es un reo alojado en una celda que el mismo va estrechando en su mente cayendo en la desesperación que conduce a la lánguida depresión, al pensamiento de querer desaparecer totalmente al sentir que ya ha desparecido para la sociedad. Y la sociedad no hace nada que no sea hundirle más. El desempleado, el parado, lo es por que no vale, no sirve para esta sociedad. No ha puesto los medios, no se ha esforzado, no es lo suficientemente válido. No encaja dado que su trabajo no puede ser vendido, nadie lo compra. No hay sitio para él, administraciones se esfuerzan en que piense de esta forma. Hablan de La cultura del esfuerzo aquellos que ya no se esfuerzan y quieren que lo hagan los demás y buscan excusas para aumentar sus réditos. Nadie habla de la cultura de la solidaridad, empatía y compasión, del aunar esfuerzas de la colaboración, del destino único de todos los hombres y mujeres.

El servicio de empleo de La Comunidad de Madrid es más dinámica con aquellos que cobran el desempleo que con  los que ya no lo cobran. Estos ya están fuera, no preocupan ni interesan. En cambio, los otros cuestan un dinero a las arcas públicas, esas que no se han preocupado por proteger. Y el parado se siente más ajeno a una sociedad que ya no le quiere, que no tiene un sitio para él. Y no puede crear conciencia de clase porque en su casa se está hundiendo poco a poco en el pozo de la depresión, esfumándose con cada minuto que pasa sin luchar, solo y alejado de otros que están en su misma situación y comparten su misma mala suerte.

Ya no hay lucha, hasta ese derecho nos han quitado.




miércoles, 26 de junio de 2013

La goma

Una goma sujeta la pelota que vuelve y vuelve para ser golpeada. Una goma me sitúa a mí a tu derecha a veces, a tu izquierda otras, arriba, abajo, cerca y lejos. ¿Soy yo  el que se mueve o eres tú?¿O ambos viajamos por el mundo estirando de la goma?

Ya no juego al juego de los espejos, ya no quiero una etiqueta más, ya no quiero ponerle un nombre a las cosas para darles vida en mi conciencia. Solo quiero ver mi imagen reflejada en la superficie del estanque rizada de ondas

martes, 11 de junio de 2013

Irrealidad incongruente

Estos sentimientos que me habitan dejarán paso a otros en un ciclo sin fin. Estos pensamientos que me preocupan dejarán paso a otros. Y aunque algo vaya quedando, el tiempo no deja que todo siga igual.

Lo que fue verdad deja de serlo y lo que fue mentira... quizás siga siéndolo. Yo no sé, solo soy un viajero del tiempo sin respuestas, navegando en un mar de dudas e ignorancia.

Adiós redes, hola JoF

Todos los meses compraba "Redes para la ciencia" de Punset... hasta que se acabó. En mi opinión era de las mejores revistas de divulgación. Lamentablemente dejó de publicarse, pocos debimos ser los que la comprábamos regularmente. Hoy he descubierto http://jof.feelsynapsis.com/  y promete, aún no la he leído.

viernes, 17 de mayo de 2013

Solo andar

Tantas veces me he salido del camino, tantas veces he vuelto a encontrarme, tantas veces pensé no volver a perderme, tantas veces pensé que no estaba perdido.

viernes, 10 de mayo de 2013

Trazos

Somos líneas que un hábil dibujante traza en un papel,  partes de un dibujo que no podemos ver.

miércoles, 24 de abril de 2013

Supramortal

Es un ser que se mueve por los intersticios de la sociedad, incluso a veces de la realidad. Te ve a ti sin que suelas reparar en él. Se mueve con agilidad sin apenas cambiar de sitio, a veces está en un lugar y otras en todos. Es un atisbo de conciencia que se asoma a un abismo de vértigo. Es solo un sueño que viaja por tu mente.

domingo, 21 de abril de 2013

La zarigueya

Buscaba una zarigueya, en lo profundo del bosque, que apenas podía ver con el rabillo del ojo, cuando miraba dirigiendo la vista, ya había desaparecido. Volvía la vista y de nuevo aparecía agazapada ahí donde no podía mirarla directamente.

Sabía donde encontrarla, si pudiese mirarla, pero acercarse solo mirando por el rabillo del ojo es muy difícil así que se conformó con seguirla de soslayo.

jueves, 18 de abril de 2013

Fukoaka


Dedicado a mi amigo Javi, quién me ha dado la referencia y me ha inspirado.


http://es.wikipedia.org/wiki/Masanobu_Fukuoka

Me impresiona. Me impresiona además que hace algunos meses estaba pensando en cosas parecidas, hasta en escribir algo sobre ello, pero más relacionado con las ciudades. Claro, es lo completamente opuesto a la naturaleza y fácil comparar y ver las diferencias y sus consecuencias. Lo que pasa que cuesta pasar a palabras lo que no es más que una intuición muy, muy tenue y mucho más para una cabecita como la mía.

En la naturaleza todo tiene su lugar: se limpia por si sola, se regenera interactuando todas las partes en una concordancia armoniosa de deshechos y necesidades, una red de utilidades. Las ciudades, si las dejas, se ensucian y envilecen. Hay que tener métodos dirigidos únicamente a limpiarla, sin más más orientación. 

En la naturaleza, las mierda de las vaca le sirven al escarabajo pelotero para poner sus huevos. El escarabajo limpia, pero no por que sea su obligación,  encuentra una utilidad en recoger la mierda de vaca y hacer pelotas: el deshecho de unos es la riqueza de otros

Nuestros deshechos son contaminantes, algunos extremadamente tóxicos. O acumulamos nuestra mierda de forma indecente, construimos lugares de acumulación tóxicos y que nos enferman.

Pensaba yo si podría existir ese tipo de ciudad donde nuestros deshechos, naturales o artificiales,  fuesen asimilables por organismos que sacasen provecho de ellos. Un lugar donde la limpieza no tuviese que ser organizada en cuadrillas de empleados que retiran materia. En un ciclo continuo los deshechos de nuestra sociedad se reutilizasen por otros organismo que sacasen vida de ellos

Ésta simbiosis existe, Fukoaka lo estudió. Es la plena integración con la naturaleza. El hombre puede ser consciente si se interesa en conocer sus ciclos y necesidades.





lunes, 8 de abril de 2013

Tres perros

Me miraba con mirada amenazadora. Tras mis pasos andaba ese perro negro. Yo iba volviendo la cabeza temeroso de que me mordiese en la pantorrilla aprovechando un despiste. Cruzando el puente, ese perro seguía a mi espalda hasta que me aparté a un lado a  mirar el río y el continuó su camino, aparentemente tan temeroso de mí como yo de él.

Pero por la noche vino otro perro a visitarme, un pastor alemán con ganas de morderme, seguramente en el cuello. Si el primero me temía, este tenía la intención clara de ver mi sangre fluir y lamerla mientras se perdiese por la carótida formando río de hierro y muerte. Afortunadamente pude huir de él al abrir la ventana de la realidad y dejar que el sol de la conciencia iluminase, aún en una suave penumbra, la habitación que aloja mi cerebro.

Aún vino a visitarme un tercer perro que hablaba y contaba y quería ya viejo marchar al cielo de los perros, dejar libre a su amo bien amado que tanto le cuidó y al que tanto quiso.


viernes, 5 de abril de 2013

Azar

Apenas unas milésimas de milímetro harán que la bola caiga en sitios dispares, golpeando en su caída los clavos de la tabla.

Un par de siglos apenas son nada en la historia de la tierra. Una piedra en un río llevada por la corriente golpeando con otras hasta llegar al mar. Como si todo estuviese escrito en los clavos de la tabla, sin embargo, ningún sistema finito puede alcanzar la conciencia del azar.

Rápido

Las cosas suceden rápido, sin dejar poso. El alma se mantiene inmaculada recordando que la mejor época es la infancia. Siempre vuelvo sobre mis pasos con nostalgia y esperanza de volver a esa época dorada donde todo es posible, donde el alma apenas magullada lo aguanta todo.

Si el tiempo pasa rápido, y el  universo entero no puede confabularse para darnos gusto, será el flujo de unas corrientes anónimas y sin conciencia, un sincronismo que se va perdiendo, un flujo que lentamente se agota.

jueves, 7 de marzo de 2013

¿Por qué se mueren las abejas? (I)

Hoy han anunciado que las raciones se reducen. Se va haciendo difícil subsistir. Se me cae el alma al suelo viendo a mis niños tan delgados, no sé que pasará mañana. A veces pienso acabar con todo y  con este sufrimiento. El gobierno no da las tasas de suicidios, pero todos conocemos algún vecino, o la familia aquella... es terrible.

La policía ha desmantelado una banda que raptaba niños. El tráfico de carne humana ya no es anecdótico, encontraron restos congelados y descuartizados en una nave a las afueras . Si encuentran a los consumidores ¿les harán algo?

La agricultura es cada vez más escasa, ahora donde se produce mucho es en el norte donde el clima es muy cálido pero no tan tórrido como aquí.  África se ha convertido en un gran desierto de cadáveres. Ya solo subsisten especies carroñeras que se alimentan de la putrefacción, hasta que se acabe.

martes, 5 de marzo de 2013

¿Por qué se mueren las abejas?

No es que pareciese una buena idea, era una buena idea. ¿No me digas que nunca te ha pasado?  Despiertas de un sueño de buena mañana y en tu vida todo encaja. Vives confiado sabiendo en ese momento lo que va a ocurrir o a que vas a dedicar tu vida mientras vuelas en una nube camino del trabajo.

Se me ocurrió mientras conducía, sí, precisamente camino del trabajo. Un ordenador, por dios, y poder escribir en ese momento todo lo que pasaba por mi cabeza. Era una buena idea, lo juro.  Juro que de haber podido parar en ese momento le habría dado forma, era claro, muy claro, todo estaba claro, de verdad, solo un momento para meditar y escribir, solo un momento...

Despiertas del sueño y la sensación de bienestar te dura prácticamente todo el día. Te encuentras arrullado y arropado entre algodones. Nada podría hacer cambiarte esa sensación, pero al día siguiente ya desapareció. Apenas un día de gloria, un día pensando que todo era increiblemente posible, al alcance de los dedos. Pero solo era un sueño...

De verdad juro que por un momento lo tenía, que de verdad era una buena idea, pero ahora no puedo darle forma, se ha vuelto trivial y absurda, tan prosaica como mi vida.

sábado, 2 de marzo de 2013

Presentación de la "economía del bien común"

Conferencia de Christian Felber de "La economía del bien común" en la "Nau" de la Universitat de Valencia.

http://roderic.uv.es/handle/10550/26165

Saltaros la presentación y empezar en el punto donde empieza a hablar Christian. una exposición clara de la economía del bien común, basada en dotar al hombre de valor en sí mismo, de darle importancia a lo que lo tiene, que en el fondo es el hombre y la naturaleza que lo rodea.

La economía del bien común es para el hombre,  sin abstracciones encubridoras de una realidad interesada para hacernos sumisos y obedientes, sin quimeras que nadie entiende y que desvían la atención del problema real: la dignidad de la vida, el hombre y su relación con la naturaleza,  el sentido de la comunidad y las relaciones humanas.

Christian Felber lo presenta de forma clara y comprensible, sin artificios.

Warren Buffet, uno de los hombres más ricos del planeta, nunca invierte en negocios que no entiende. De igual forma, yo desconfío de los discursos que no presentan todas las variables del problema o que me piden un acto de fe. Si algo no lo entiendes, quizás te estén embaucando. Si te piden que confíes y no ves la relación entre las partes del problema y la solución que te presentan, quizás tengan algún interés oculto. Y siempre que te embaucan o se dirigen a ti con un interés oculto te suelen intentar robar algo.

La economía moderna secciona la realidad y solo se fija en una cosa muy pequeña: el beneficio de la actividad económica. Nuestro sistema educativo produce mayoritariamente dos tipos de personas: sumisas y obedientes y avariciosas en extremo. La sumisas están convencidas de que las cosas han de ser como son y las avariciosas centran toda su actividad y esfuerzo en ganar y ganar muy por encima de lo que les es necesario. Las sumisas no quieren cambiar el orden establecido. Todas los días van al trabajo, se ganan su salario cada día más exiguos y el resto del poco tiempo que les quedan lo dedican al cuidado de sus relaciones sociales: familia, amigos, etc. Las avariciosas quieren más y más y más y todas sus relaciones están viciadas por esta necesidad de estar por encima de sus congéneres. La economía lo gobierna todo, es el sistema de relaciones, no solo económicas, en el que el hombre es otra cosa más, algo sin valor, que se usa en beneficio propio, del que no nos importa más que el dinero que nos puede proporcionar por medio de su fuerza de trabajo. El sistema educativo forma parte del sistema económico, se educa para ser un engranaje de la maquinaría económica, absurda, mecánica, carente de valores humanos y centrada en beneficiar a unos pocos.

En la cuenta de beneficios de la economía actual no hay variables medioambientales como tampoco hay variables  que midan la felicidad de las personas en una sociedad. En esta rueda en la que estamos metidos de crecimiento continuo, rueda que si para se cae, no se vislumbran soluciones al hambre en el mundo, la sobre-explotación de los recursos naturales, la contaminación, la perdida de la bio-diversidad, los conflictos sociales y mundiales. Te piden que tengas fe en una supuesta economía que se auto-regula para que mágicamente se arreglen los problemas. Este laissez-faire beneficia solo a las clase dominantes y a los avariciosos que entienden el sistema, son lo mismo.

A mi me queda una duda sobre la economía del bien común por despejar ¿se corromperá? ¿sus impulsores tendrán algún motivo espureo para promoverla? No deja de ser interesante observar su evolución y ver hasta donde llega.

Lo claro es que cualquier sistema social que no tenga en cuenta al hombre y al planeta, incluyendo la economía como algo secundario en la sociedad, está abocado al fracaso. Es como una enfermedad que termina por matar al enfermo en oposición a una simbiosis en la que los dos seres obtiene un beneficio. Nuestra economía actual nos mata y terminará por matar a todo el planeta.





viernes, 15 de febrero de 2013

Un hombre al borde del acantilado

Un hombre al borde del acantilado mira romper las olas contra las rocas. Siempre supo que su destino era universal y que vino para hacer grandes cosas. Ahora, los recuerdos de su vida ajada rompen contra las rocas y son llevados por las olas a todos los mares de la tierra.

martes, 12 de febrero de 2013

Tierra

Un animal vive debajo de la tierra. Los latidos de su corazón hacen subir las mareas, sus ronquidos producen terremotos, su aliento forma geiseres que emanan sulfuro y su sudor fluye como ríos. Sus mocos de animal enfermo es la ponzoña de los ríos y los mares donde anidan las bacterias de la podredumbre y el mal olor.

Olas y mares

Suena el agua, rizada por el viento, las olas lamen la arena y en el seno del mar las corrientes fluyen y se empujan.

¿Qué hay antes de la conciencia? La espuma del mar que abandona la arena, la arena que se seca y cambia su tono bajo el sol, el sol que nos calienta y genera el viento, las olas y el flujo del agua.

Una burbuja de esa espuma que deja la ola que abandona la playa, soy yo. Hago "plop" y exploto.

Una lágrima intenta salir, pero no procede. Quiere acariciar la mejilla, pero su dueño no la deja. Quiere escapar y dejar descansar la garganta atenazada. Es una lágrima de felicidad, quizá, de sentir la emoción de estar vivo.

Pero su dueño no la deja salir, porque no procede.

La tierra sigue girando ajena a lo que pasa, la luna no mira y el sol agita el mundo.

Yo conocí un niño que piensa que dios no lo puede todo y se pregunta qué es lo que anima la conciencia, que conciencia hay detrás de ella, y más atrás aún.  Hace tiempo que no tengo noticias de él, quizá esté muerto, quizá habite entre la tierra y el sol agitando las corrientes del mar, ayudando a la luna con las mareas. Quizá pensó que no procedía dejar caer una lágrima inoportuna y tantas atrapó que se ahogó dentro de sí. No sé.


lunes, 21 de enero de 2013

Crhistian Felber

Un tipo a seguir, segunda referencia que me llega (gracias Javi por la primera, la apunté como puedes comprobar)

http://es.wikipedia.org/wiki/Christian_Felber


Página en español del movimiento de "La economía del bien común": http://www.gemeinwohl-oekonomie.org/es

viernes, 18 de enero de 2013

Ultravioleta

Algunos insectos perciben el color ultravioleta. Nosotros podemos ver el color ultravioleta con cámaras especiales que lo cambian por alguno de los que sí que podemos percibir de forma directa. Si pudiésemos verlo como aquellos insectos ¿Qué aspecto tendría? Del rojo al azul, uno más allá del azul.

El inhibidor de la realidad

La realidad, qué será eso. Yo cierro los ojos y desaparece gran parte de ella. Pero aún más, dejo a los pensamientos que vengan, sobre todo esos que como pescadilla frita se muerden la cola, y ya la hemos liado, no solo se muerden la cola, si no que además se comen el resto de la realidad que queda. Aunque abra los ojos ya ha desaparecido todo. Luego cuesta mucho reconstruirlo de nuevo.


viernes, 11 de enero de 2013

La última

Quizás no sea la piedra más bonita que Dios arrojó a la playa, pero soy yo y, cuando las olas del mar se retiran, brillo al sol como ninguna otra.

A veces pienso que he cometido la última estupidez, pero sé que vendrán otras. Alguna vez he pensado que no volvería a sonreír  y volví a hacerlo. Sé que si pienso en que jamás volveré a arrepentirme por algo que haya hecho, me acordaré de ello el día que nuevamente me esté arrepintiendo.

Y mientras las olas del mar me bañen, lloraré y reiré y así seguiré mientras sea yo.

miércoles, 9 de enero de 2013

En tiempo de nuestros hijos

La voz nasal de Alfonso Sánchez cuenta datos y más datos de la película que van a poner después. La imagen es en blanco y negro y se ve el pliegue de una cortina marcando una línea vertical a la derecha del crítico de cine. Alfonso Sánchez fue un crítico enciclopédico, era la wikipedia del cine de los años 70. Para mí es un personaje mítico. Su voz me hipnotizaba y poco importaba que no entendiese a mi tierna edad nada de lo que contaba.

Lo puedes escuchar aquí:
http://media7.rtve.es/resources/TE_SARCHI/mp3/6/0/1266242256506.mp3

Como todos los recuerdos este también es una nube de vapor que se va difuminando con el tiempo. En este momento recuerdo al replicante mojado por la lluvia y relatando todos aquellos recuerdos que se perderán con su muerte. ¡Cuanta vida hay en cualquiera de nosotros!

Los actores van cambiando y yo, imagino que como todo el mundo, me he quedado con unos pocos que me impactaron de niño y adolescente. Y pocos más vamos agregando, quedándonos en una época que es "nuestra época". ¿Acaso no vivimos en esta? Sí, pero nuestros recuerdos, sentimientos y emociones se formaron en otra en la que estábamos creciendo y dándole un sentido al mundo de fuera y al de dentro también.

Mis hijos crecen y van teniendo sus propias referencias, puntos de apoyo sobre los que colocan sus pies y se yerguen en el mundo. Aparecerán nuevas tecnologías que yo ya no sabré manejar y ellos sí, al menos espero que pueda mantener la capacidad de escribir un poco usando alguna de ellas.

lunes, 7 de enero de 2013

La máquina de sentirse bien o mal

Mi cerebro adolescente era la máquina de sentirse mal. Entendía que la vida era según el cristal con que se mira y yo tenía un cristal desvaído y no tenía otro para mirar a mi alrededor. Actualmente hay una intervención de neurocirugía que se practica a casos muy severos de depresión: se aplica una descarga eléctrica, imagino que con unas características muy definidas, en cierta zona del cerebro para conseguir que se establezcan más conexiones entre el cerebro más profundo, la amígdala, y el más evolucionado, la corteza cerebral. De esta forma se consigue que la parte del cerebro donde anidan nuestros miedos esté en comunicación con la parte más consciente, la que mira al mundo y a nosotros. Teorizo que de esta forma hacemos conscientes nuestros miedos y dejan de flotar en una aura indefinida de malestar, podemos razonar sobre ellos y determinar que sentido tienen o cual hemos de darle. La referencia a la intervención la encontré en un número de redes para la ciencia, no sé si en el de noviembre o en el de diciembre.

Si no digo mal, uno de los retos de la física es unificar las cuatro interacciones conocidas de la naturaleza en una fórmula que le de un sentido común y explicarlas como un único fenómeno. El tacto es la percepción de una de esas interacciones: la repulsión de los electrones de los átomos de nuestro cuerpo y del objeto que nos presiona. Se generan corrientes que viaja por nervios hasta el cerebro donde se procesa y se le da un sentido. Una interacción electromagnética interacciona con los conos o bastoncillos del fondo de nuestros ojos y la traducen en una corriente eléctrica que viaja de la misma forma al cerebro donde otras corrientes que circulan por neuronas le dan un sentido. El mundo no existe o no existe en la forma que nosotros pensamos: es la sustanciación que hacen nuestros tejidos cundo interaccionan con lo que está fuera de ellos. Una actividad electromagnética excita nuestros ojos y vemos formas y colores; una partícula de olor estimula nuestro olfato y sentimos un olor. El color y la forma es un invento de la mente, la realidad tal como la experimentamos solo existe dentro de nosotros.

A mí me resulta extraña la existencia del yo que tal como la definió el filósofo, el yo, esa relación que se relaciona consigo mismo. Las emociones y la conciencia derivadas de unas pocas leyes físicas que generan una complejidad caótica, inmensa, me resulta extraño y emocionante.

Siempre he tenido la sensación de que a la realidad había que mirarlas varias veces y quedarse con lo mejor que viésemos de ella, con lo que menos daño nos haga. Si la vida es del color del cristal con el que se mira, he intentado analizar que le pasa a mi cristal, he intentado pulirlo y darle un color más alegre y agradable y creo que he conseguido mucho o, al menos, bastante. Conseguir mirar la vida con el color de cristal apropiado es un camino que deberíamos hacer todos, no merece la pena, ya que nos inventamos la existencia, que esta tenga que ser más penosa de lo necesario. Puede que a mi me falten algunas conexiones entre la amígdala y el cortex cerebral, pero la conciencia de que la vida puede ser algo mejor me hace esforzarme en varias cosas: una es intentar reducir esos pensamientos cíclicos y obsesivos que muchas veces nos abruman pero que no son más que un darle vueltas a lo mismo y que no conducen a nada; potenciar un pensamiento creativo, buscar momentos de placidez en los que el pensamiento fluya y, por ejemplo, me hagan pensar en cosas como las que escribo en este blog y otras; buscar esas actividades que me sean realmente satisfactorias, en las que la mente descansa y el cuerpo se relaja; cuestionar no solo los enfados de los demás y no estar echándole siempre las culpas al mundo por lo desgraciado que me ha hecho y buscar que hay de racional y qué de irracional en mi conducta y en mis enfados; disfrutar cuando estoy a bien con la gente y no intentar ir más allá, no dejar que cosas ajenas a lo que me importa de verdad me perturben o envenenen la relación con mis seres queridos. Perdonar la ofensas, pero no por ello quedarme desprotegido ante ellas, ni buscar la compañía de aquellos que me hacen mal, por el contrario, buscar compañías enriquecedoras

viernes, 4 de enero de 2013

En un lugar del universo



Ocupo un lugar que fue ocupado por miles de almas que se emocionaron quizás como yo ahora

Ocupo un lugar del universo que ha sido ocupado por miles de almas, vidas que precedieron a la mía.

Siento mi alma atravesada por otras miles de las que no sé nada, que estuvieron donde me encuentro y noto como crece una angustia profunda, el desasosiego de no poder verlas y sentirlas, de no poder experimentar el universo eterno en una fracción de segundo.

Mi corazón late con fuerza mientras pienso en lo que no aprenderé, en lo que olvidaré, en quién no conocí.

Ahora, el vapor de la emoción embriagadora se eleva al cielo y noto como se me despeja el alma, vuelvo a ser yo, un ser normal que se desplaza en un plano. La cabeza se me aclara mientras la emoción que me atravesó vuela y alcanzo la cordura de la nimiedad.

Quiero volver a angustiarme, con esa pasión que me hace pensar que quizás mil almas puedan flotar a mi alrededor, que se puede vivir la eternidad infinita en una fracción de segundo. Ansío volver al momento donde una extraña emoción me haga volver a un rincón olvidado de la memoria, de una infancia remota, de una lejana juventud.

Feliz 2013